Os cuento……. Estas Navidades no, las anteriores, compramos una tabla de surtido de quesos
franceses para darnos el pegote y el lote también, en el que venían muy bien
presentados sobre una bandeja redonda de mimbre con asas, varias cuñas de diferentes tipos de queso con
un papel dentro donde se explicaba el tipo y procedencia de cada variedad.
El problema surgió cuando quitamos el plástico que los
recubría y metimos la bandeja de surtido de quesos en la nevera, aún estando
los quesos sin abrir, empezó a desprenderse un olorcillo tan familiar como este:
La peste como en la Edad Media, vino después, cuando
preparamos unas tablas de queso y reservamos el resto en la nevera para otra
ocasión
No lo recomiendo a nadie porque mantuvimos dicho aroma en el
frigo y en la cocina cada vez que abríamos la puerta durante casi todas las
Navidades pues la verdad es que cundieron bastante.
Menos mal que ahora no tengo niños pequeños porque si así fuera , los tendría igualito que este
peque husmeando en la nevera intentando descubrir de donde procedía semejante
pestilente aroma
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